7 de Febrero de 2011 - 09:10:12 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 7 de febrero de 1518 Carlos I reúne las Cortes de Valladolid y jura en ellas su cargo. Lleva apenas unos meses en España y no habla en absoluto el castellano. Tiene diecisiete años. Desembarcaba un 18 de septiembre en la costa asturiana, acompañado de su séquito. Ya es Rey de los Países Bajos, viene a recibir Castilla y Aragón y su mente está entonces en la corona de emperador que le corresponde de su abuelo Maximiliano. No quiere que el monarca francés Francisco I pueda entrometerse en su derecho dinástico. En España tampoco lo tiene fácil. Su hermano Fernando ya cuenta con su propio partido y notables adhesiones. Las Cortes de Valladolid le han apremiado a viajar a España pero él se ha tomado su tiempo. Llega con año y medio de retraso. Quien más impaciente espera es el cardenal Cisneros, su gran baluarte, a quien ya no conocerá. Con ochenta y un años, morirá caminando a su encuentro. El Rey tiene un aire absorto y poco agraciado. Su corte resulta antipática y la demora enfurece los ánimos. Hay demasiada expectación y demasiados intereses en juego. Para colmo, el Rey viene a pedir dinero.
Carlos I había repartido ya prebendas entre su corte flamenca. El artero Chièvres era contador de Castilla, su sobrino, de apenas diecisiete años, arzobispo de Toledo, y Adriano de Utrecht obispo de Tortosa. Nada dolía más que la humillación de ver a un flamenco, chiquillo encima, primado de Toledo. Con tan tenso ambiente se abrieron las cortes castellanas que trataron de poner coto al absolutismo regio y conservar sus privilegios. El obispo Mota habla en nombre del Rey. Recuerda las muchas glorias frente al infiel y apunta al Imperio turco como la nueva amenaza. Cualquiera diría que Carlos es ya emperador del Sacro Imperio y ve peligrar su frontera oriental. Pero Castilla, «la fuerza de todas sus fuerzas», quiere bajar al rey de su pedestal. Su único y sagrado deber es obrar con justicia y por el bien de su pueblo. Quieren a los flamencos fuera de la administración, que el Rey aprenda español y que les dé un heredero. No obstante financiarán su ambición imperial. Peor le irá al monarca en Aragón y Cataluña. Aquel mal comienzo derivará en la revuelta de las Comunidades pero el joven rey regresará ya emperador y sabrá encauzar su reinado para ganarse el corazón de los castellanos y convertir a España en la primera potencia de Occidente.
Otras efemérides de este día:
1521: Alzamiento en Valencia que da comienzo a las Germanías.
1588: Lope de Vega es condenado a cuatro años de destierro por difamar a su ex amante Elena Osorio.
1596: Fallece el pirata inglés sir Francis Drake.
1836: Termina la batalla de El Álamo, en Texas, célebre por la enconada resistencia en el fuerte del Álamo, cuyos defensores perecieron.
1897: Recepción de Pérez Galdós en la Real Academia Española.
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