1 de Abril de 2011 - 09:10:12 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 1 de abril de 1939 Franco dictaba el último bando de la guerra: «En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, han alcanzado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado».
La Guerra Civil española se había diseñado como un enfrentamiento rápido pero se acabó convirtiendo en un infierno interminable, una guerra de trincheras, de angustioso desgaste y escasa creatividad táctica. El punto de inflexión fue el fracaso nacional en la conquista de Madrid a los seis meses de conflicto. La férrea defensa de los republicanos y la llegada de las Brigadas Internacionales obligaron a Franco a renunciar a la capital, iniciando un avance cauteloso y bien pertrechado en el que cada plaza se ganaba pagando un tributo de sangre. La prolongación de la contienda favoreció la intromisión de las potencias internacionales: Rusia y Francia apoyaron a los republicanos mientras que Italia y Alemania se situaron del lado de los sublevados.
Tras el fracaso de Madrid el frente se desplazó al norte, donde los nacionales lograron romper el «cinturón de hierro» de Bilbao y vencer en la segunda batalla de Teruel. La fase crucial de la guerra se iniciaba en la primavera de 1938 con la batalla del Ebro. Los republicanos acudieron con todo su potencial y la campaña se convirtió en la más sangrienta de la guerra. Las bajas en ambos lados fueron enormes, pero para el bando republicano, que administraba peor sus recursos, resultó definitiva. Con la caída de Barcelona los últimos líderes republicanos se exiliaban a Francia y la República quedaba en manos del eje Madrid-Valencia, con Negrín al frente. En medio de una lenta agonía, Julián Besteiro se impuso a Negrín en una refriega civil dentro del bando republicano y solicitó una «paz honrosa» que fue denegada por los nacionales.
La Guerra Civil fue una catástrofe en la historia de España, con más de 60.000 muertos por cada bando y otros tantos ejecutados en las crueles purgas de los primeros meses de la guerra. Peor aún sería la posguerra, la etapa más triste de nuestra historia reciente. Hambre, miseria, desconfianza, todo un país por reconstruir y una idea que madurar: que las dos Españas nunca más volvieran a enfrentarse.
Otras efemérides de este día:
1721: Comienza la construcción del Palacio Real de La Granja, en Segovia.
1868: Nace en Francia el poeta Edmund Rostand.
1924: Hitler es condenado a cinco años de cárcel por alta traición.
1940: Primer Desfile de la Victoria y plan para la construcción del Valle de los Caídos, que se inaugurará también un 1 de abril, de 1959.
1993: Fallece don Juan de Borbón, hijo y padre de reyes que no pudo reinar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario