lunes, 20 de abril de 2015

20 de Abril de 1796:La expedición de Malaspina


20 de Abril de 2011 - 09:10:01 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 20 de abril de 1796 era condenado a diez años de cárcel Alejandro Malaspina, acusado de conspirar contra Godoy. Poco antes el marino italiano había sido recibido como un héroe por el rey Carlos IV, que le había prometido la próxima publicación de los resultados de su fabulosa expedición. Sin embargo, un año después era declarado «reo de Estado», procesado y encarcelado. La comisión para la preparación de las conclusiones sería disuelta y los resultados del viaje no se publicarían hasta cien años después.
Alejandro Malaspina era un reputado marino italiano, protagonista de innumerables expediciones militares y científicas, incluida una circunnavegación del globo, prestigio suficiente para que le fuera encargada la primera expedición científica destinada a abrir nuevas vías de navegación por el Pacífico. Al mando de una pequeña flota de dos corbetas, la Descubierta y la Atrevida, recorrió las costas del Pacífico durante cinco años y dos meses. Su objetivo era la elaboración de cartas de navegación y estudios hidrográficos para la apertura de nuevas vías comerciales que dieran un impulso a una navegación plana y encorsetada por la rutina. No sólo eso, la expedición trataría de compilar especies, lenguas y pueblos, y hacer inventario de todos los recursos materiales y sociales del Imperio colonial.
Por primera vez embarcaban en un buque de guerra español botánicos, astrónomos, cartógrafos y dibujantes, reclutados de todos los extremos de Europa y capitaneados por un marino italiano. Malaspina sabía que navegaba aguas muy trilladas y que el éxito de su expedición no dependía tanto de asombrosos descubrimientos como del «conocimiento cabal de unas posesiones inmensas». Para Malaspina, educado en la Ilustración, ese conocimiento racional suponía más alta empresa que un descubrimiento al estilo clásico, que implicaba la conquista y la dominación.
La caída en desgracia de Malaspina tras su exitosa expedición se explica por los rápidos cambios políticos que se sucedieron. Malaspina desembarcó en Cádiz el 20 de septiembre de 1794. Había partido en vísperas de la Revolución francesa y la España que se encontró, cinco años después, había enfriado el reformismo ilustrado que aún prevalecía de los tiempos de Carlos III. Su hijo Carlos IV, y sobre todo el nuevo valido, Manuel Godoy, veían sus trabajos desde una óptica más política que ilustrada.
                                                                                      
Otras efemérides de este día:
1194 El rey de León, Alfonso IX, y el de Castilla, Alfonso VIII, firman el tratado de Tordehumos.
1693 Fallece Claudio Coello, pintor de cámara español.
1898 Manifestaciones en Madrid contra Estados Unidos por su intervención en Cuba.
1902 Marie y Pierre Curie logran aislar el radio.
1924 Nueva Constitución en Turquía tras el triunfo de la revolución de Ataturk.

domingo, 19 de abril de 2015

19 de Abril de 1832: Nace José de Echegaray

Fue un ingenierodramaturgo,político y matemático español, hermano del comediógrafo Miguel Echegaray.
José Echegaray fue un polifacético personaje de la España de finales del siglo XIX, con excelentes resultados en todas las áreas en las que se involucró. Obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1904, y desarrolló varios proyectos en ejercicio de las carteras ministeriales de Hacienda y Fomento. Realizó importantes aportaciones a las matemáticas y a la física. Introdujo en España lageometría de Chasles, la teoría de Galois, las funciones elípticas. Está considerado como el más grande matemático español del siglo XIX. Julio Rey Pastor afirmaba:
Para la matemática española, el siglo XIX comienza en 1865 y comienza con Echegaray.
  Su padre, médico y profesor de instituto, era de Aragón y su madre de Navarra. Pasó su infancia en Murcia, donde realizó los estudios correspondientes a la enseñanza primaria. Fue allí, en el Instituto de Murcia, donde comenzó su afición por las matemáticas.
Con el objeto de preparar el ingreso a la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, se trasladó con catorce años a Madrid, donde ingresó en el recién creado Instituto de Segunda Enseñanza San Isidro. Cumplidos los veinte, salió de la Escuela de Madrid con el título de Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, que había obtenido con el número uno de su promoción, y se tuvo que desplazar a Almería y Granada para incorporarse a su primer trabajo.
En su juventud leía a GoetheHomero y Balzac, lecturas que alternaba con las de matemáticos como GaussLegendre yLagrange.
José Echegaray mantuvo una gran actividad hasta su muerte, ocurrida el 14 de septiembre (en algunas publicaciones aparece el día 4) de 1916 en Madrid. Su extensa obra no dejó de crecer en la vejez: en la etapa final de su vida escribió 25 o 30 tomos de Física matemática. Con 83 años comentaba:
No puedo morirme, porque si he de escribir mi Enciclopedia elemental de Física matemática, necesito por lo menos 25 años.
 Otras efemérides de este día:
1783: Paz de Versalles, por la que concluye la guerra entre ingleses y norteamericanos y se reconoce a éstos la independencia.
1832: Nace José Echegaray.
1937: Finaliza la construcción del Golden Gate en la ciudad de San Francisco.
1956: Boda del príncipe Rainiero de Mónaco con la actriz estadounidense Grace Kelly.
1995: José María Aznar sale ileso de un atentado con coche-bomba, cargado con unos 30 kilos de explosivos, perpetrado cerca de su domicilio por tres terroristas de ETA.

sábado, 18 de abril de 2015

18 de Abril de 1847: Primera Feria de Abril en Sevilla

18 de Abril de 2011 - 09:10:17 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 18 de abril de 1847 se celebró en Sevilla la primera edición de la Feria de Abril, que en sus orígenes tuvo un carácter comercial, bien alejado del gran evento social que es hoy. La iniciativa partió de dos empresarios, Narciso Bonaplata y José María Ybarra, quienes propusieron al cabildo la organización de una feria agrícola y ganadera de carácter anual. Curiosamente eran un catalán y un vasco quienes ponían los cimientos de lo que se convertiría, con el paso del tiempo, en una gran exhibición de cultura popular sevillana y andaluza. Con no pocas dificultades y algunos intentos de boicot por parte de las ferias vecinas, se estrenó la Feria de Abril. Los eventos estelares fueron los propios de su naturaleza: una exposición de reses de gran tamaño, en la que los ganaderos competían por el premio al buey que sobrepasase con mayor abundancia las mil libras de peso, el galardón al mejor lote de diez carneros de lana merina o el caballo más veloz medido en carrera. La exposición equina, uno de los acontecimientos que genera hoy mayor interés, formó parte desde el principio de la esencia de la feria. Junto a la gran explanada que servía de pasto al ganado discurrían, en dos filas desordenadas, puestos de dulces y algodón, tabernas en las que corría el vino y otras para echarse algo a la boca, tiendas de juguetes, cuero y paños, joyería y otros géneros, tiovivos para los más pequeños e innumerables atracciones. Se pusieron en total 19 casetas, cifra algo alejada de las más de mil que hoy coronan el recinto ferial. Sin embargo, la aceptación fue mayúscula. Para cerrar el evento se lidiaron ocho toros, y ni la lluvia de los últimos días consiguió enturbiar la acogida popular. En años posteriores la Feria de Abril fue ganando empaque, convirtiéndose en el gran evento de la primavera andaluza. Llena de dinamismo, la feria fue perdiendo carácter mercantil y ganando tono festivo. Con la posguerra, a la feria le costó encontrar su armonía, recuperar su tono y su carácter. Por eso, cuando en 1973 abandonó por motivos de espacio su tradicional emplazamiento en el Prado de San Sebastián para trasladarse al barrio de Los Remedios, muchos pensaron que en el trayecto extraviaba definitivamente sus esencias. Sin embargo, estaban lejos de acertar. El barrio de Triana devolvió a la feria su alegría natural y el carácter festivo y popular que la consolidaron en el pasado. Hoy la feria es un evento indisociable de esta barriada, pero si en el futuro debiera trasladarse de nuevo debemos confiar en su capacidad de adaptación, pues la fiesta de abril ya forma parte de la tradición más arraigada del pueblo andaluz.
Otras efemérides de este día:
1506: Colocación de la primera piedra de la Basílica de San Pedro, en Roma, por el papa Julio II.
1891: El general Weyler comienza una larga campaña de pacificación en Mindanao. Saldrá victorioso el 1 de septiembre.
1909: Beatificación de Juana de Arco en Roma.
1922: Finaliza el informe Picasso sobre las responsabilidades de Annual.
1966: Comienza la Revolución Cultural en China Popular.

viernes, 17 de abril de 2015

17 de Abril de 1797: San Juan de Puerto Rico, Tenerife y Cádiz resisten al asedio inglés

17 de Abril de 2011 - 09:10:13 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 17 de abril de 1797 la ciudad de San Juan de Puerto Rico resistía heroicamente el asedio de los ingleses Abercrombry y Harvey, que contaban con 68 navíos y 11.000 soldados para el desembarco.
En las postrimerías del siglo xviii España practicaba una política pendular a expensas de las relaciones entre Francia e Inglaterra, buscando la alianza más conveniente o la menos gravosa, con resultados bastante cuestionables. Tras el enfrentamiento con la Francia revolucionaria, que llegó a ocupar parte de Cataluña y las Provincias Vascongadas, Godoy se había ganado el irónico apelativo de Príncipe de la Paz, a cuenta de un desastroso acuerdo firmado en Basilea. El valido debió pensar que de perdidos al río y firmó una nueva alianza con Francia, el Tratado de San Ildefonso, que pretendió mantener en secreto y que básicamente era una declaración de guerra contra Inglaterra.
Los ingleses llevaron el conflicto a ambas costas del océano Atlántico y comenzaron propinando un sonado descalabro a la flota española de José de Córdoba en el cabo San Vicente. Casi simultáneamente se produjo el ataque a la Isla Trinidad, al sur de Las Antillas, que se entregó sin oponer resistencia. La flota de sir Ralph Abercromby se dirigió entonces a Puerto Rico para unirse a la del almirante Harvey, pero el gobernador de la plaza, brigadier Ramón de Castro, ya estaba prevenido y dispuso una eficaz defensa. En primer lugar, aseguró las dos bocas de entrada de la bahía reforzando los dos fuertes que las custodiaban. Luego retiró las tropas de avanzadilla y formó «cuerpos volantes», con gran movilidad para atacar o reforzar las zonas necesitadas de apoyo. Castro rechazó la capitulación ofrecida por los ingleses y armó una enconada resistencia que desbarató todos los planes ingleses, que pasaban por combinar ataques por tierra y mar, presionando en las vías de entrada. Las fortificaciones fueron infranquea­bles, los «cuerpos volantes» desarmaron las formaciones de ataque y los vientos del norte colaboraron también, obligando a Harvey a retirar sus barcos por el peligro de verse arrastrado a los acantilados. San Juan de Puerto Rico recibió, por su heroica resistencia, el título de ciudad «Muy noble y muy leal» a la corona de España.
Otras efemérides de este día:
1492: Capitulaciones de Santa Fe, entre Cristóbal Colón y los Reyes Católicos, para financiar el viaje a las Indias, que culminó con el descubrimiento de América.
1521: La Dieta de Worms, reunida por Carlos V, discute el destierro de Lutero y prepara un edicto contra el luteranismo.
1931: Manifiesto «Al país» de Alfonso XIII, publicado en ABC.
1961: Invasión americana de Bahía de Cochinos, en Cuba.
1975: Las fuerzas comunistas de los «jemeres rojos» entran en Pnom-Penh, la capital de Camboya.

jueves, 16 de abril de 2015

16 de Abril de 1581: Las Cortes de Tomar reconocen a Felipe II soberano de Portugal

16 de Abril de 2011 - 09:10:01 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 16 de abril de 1581 el monarca Felipe II era coronado rey de Portugal en las Cortes de Tomar. Hacía ya un año que las opciones del infante don Antonio, prior de Crato, habían caído bajo la espada del duque de Alba en la batalla de Alcántara. Había sido una resistencia menor, incluso cuando un año después el prior trataba de desembarcar en las Azores ayudado por una flota de hugonotes franceses. El marqués de Santa Cruz había repelido con solvencia la agresión en la última gran victoria naval de España antes del desastre de la Gran Armada. El prior, muy desprestigiado tras una nueva derrota, se instaló en París y no volvió a reclamar sus derechos.
En definitiva, habían sido sólo cuatro meses de oposición que Felipe había zanjado de modo jactancioso, diciendo del nuevo reino que anexionaba: «Lo heredé, lo compré, lo conquisté». En efecto, el rey español había tenido que remover sus arcas para conseguir el apoyo mayoritario de la nobleza. Sin embargo, no era exactamente una anexión. Portugal no quedaba anexionado a Castilla, como muchos portugueses temían, sino que ambos reinos quedaban unidos por lazos dinásticos. Portugal conservaba sus instituciones y Felipe juró y cumplió que ningún castellano ocuparía lugar de relevancia en ninguna de ellas.
Portugal y España tenían dos claros frentes comunes, la expansión en el Nuevo Mundo y el fortalecimiento del ideal cristiano que ambos compartían. En cualquier caso, Felipe II ganaba más con la incorporación de Portugal que los portugueses bajo su mando. Lograba un comercio más rico con la incorporación de las rutas orientales y lograba una mejor defensa del Atlántico gracias a las Azores. También mejoraba sus perspectivas respecto a los insurgentes de los Países Bajos, a quienes podían llegar a bloquear comercialmente.
Sin embargo, era evidente que el reino portugués perdía empaque en la suma de reinos que gobernaba Felipe y que, a la larga, quedaría relegado a provincia, como de hecho, así fue. Tampoco era fácil olvidar que habían sido invadidos y dominados por la fuerza de las armas. Voces tan preclaras como Santa Teresa de Jesús advirtieron de este peligro. La unión que se iniciaba en las Cortes de Tomar duraría cerca de sesenta años. Y era notorio que no podía haber durado más.
Otras efemérides de este día:
1340: Abu-I-Hassan venga la muerte de Abd-el Malik y pone sitio a Tarifa. Muere Jofré Tenorio y los musulmanes dominan el Estrecho.
1622: El cardenal Richelieu es nombrado primer ministro de Francia, cargo que ejerció bajo los reinados de Luis XIII y Luis XIV.
1830: Héctor Berlioz finaliza la Sinfonía Fantástica.
1943: El doctor Albert Hofmann descubre los efectos psicodélicos de la droga LSD.
1945: El Gobierno español nacionaliza la Compañía Telefónica, propiedad de la ITT Corporation de Nueva York.

miércoles, 15 de abril de 2015

15 de Abril de 1828: Fallece el pintor Francisco de Goya y Lucientes

15 de Abril de 2011 - 09:10:18 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 30 de marzo de 1743 nace en Fuendetodos Francisco de Goya y Lucientes. Aragonés universal, Goya fue el único gran artista de su tiempo, un tiempo convulso, de veloces cambios históricos que su pincel reflejó desde el lado más puramente humano. Su arte no fue precoz, necesitaba macerar con paciencia, pero su atronadora personalidad le distraía de una mayor perseverancia. Aprendió los conceptos de la pintura en el taller zaragozano de José Luzán y, al cabo de cuatro años, decidió instalarse y probar suerte en la capital. Allí conocerá a Francisco Bayeu, pintor, paisano y más tarde cuñado suyo, que influiría de forma decisiva en su formación temprana.
Gracias a Bayeu, Goya encontrará trabajo estable en la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara, empleo que mantendrá durante diecisiete años. En este largo periodo de contenido costumbrista, su pintura encontrará la constancia que necesitaba para evolucionar en maestría. Por aquella época le empiezan a llegar encargos de la corte, sobre todo retratos de personalidades (Floridablanca, Ventura Rodríguez...) que le permitirán ganar asiduidad en los ambientes de sociedad. Su carácter rudo y sensual y su peculiar ingenio caerán en gracia a las familias más distinguidas de Madrid, los duques de Osuna, los de Altamira y, especialmente, a la duquesa de Alba. Goya es feliz con esta vida de francachela, pero a finales de 1792 sufrirá una grave dolencia que le dejará un estigma de por vida, la sordera. Aislado del mundo, impedido para la vida social, Goya inicia una etapa de introspección que se refleja en una serie de pinturas de corte grotesco y tenebroso, en las que proyecta un mundo deformado y monstruoso que le sirve para ahuyentar sus demonios. Madrid perdía un animador, pero el mundo ganaba un genio en plena madurez.
Camino ya de la vejez, Goya será testigo de una etapa de cambios históricos y políticos sin precedentes. Verá el derrumbamiento de un régimen y el levantamiento de otro, la expulsión de los reyes, la invasión napoleónica y la restauración real, presenciará la sublevación del 2 de mayo y los intentos golpistas de los liberales... Sus obras de esta época, algunas de las más famosas, no se consolarán en el fervor patriótico, sino que ahondarán en sus entrañas, conformando un descarnado retrato de la crueldad humana. Falleció el 15 de abril de 1828 en la ciudad francesa de Burdeos.
Otras efemérides de este día:
1450: Francia vence a los británicos en la batalla de Formigny, que finaliza la Guerra de los Cien Años.
1452: Nace Leonardo da Vinci.
1689: Luis XIV declara la guerra a España y en mayo entra en Cataluña.
1920: Nace el Partido Comunista de España, de la escisión de los socialistas españoles.
1938: Los nacionales llegan al Mediterráneo por Vinaroz; la zona republicana queda cortada en dos.

martes, 14 de abril de 2015

14 de Abril de 1931: Proclamación de la Segunda República

14 de Abril de 2011 - 09:10:01 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 14 de abril de 1931 se proclamaba en España la Segunda República, tras la celebración de unas elecciones municipales. Bien es cierto que unas elecciones municipales no arbitran un cambio de régimen ni legitiman la deposición de un rey, pero también lo es que Alfonso XIII hizo bien poco por mantenerse en el trono.
Terminada la dictadura de Primo de Rivera, el Rey nombró presidente al general Berenguer, cuyo gobierno de transición se conoció como «Dictablanda». Por entonces los sectores republicanos habían mejorado su organización reuniéndose en San Sebastián para firmar un pacto no escrito que venía a ser un compromiso de unidad para llegar al poder. En aquel grupo había republicanos viejos, como Alejandro Lerroux, pujantes, como Manuel Azaña, periféricos, como Casares Quiroga y Carrasco i Formiguera, socialistas, como Indalecio Prieto, intelectuales de prestigio, como Ortega y Marañón, e incluso antiguos monárquicos, partidarios de una república centrada, una república «con generales y obispos», en feliz expresión de Niceto Alcalá-Zamora.
Y así estaban las cosas cuando el pueblo fue convocado a las urnas un domingo 12 de abril. Al día siguiente en las grandes ciudades se dieron estallidos de júbilo. En 41 de las 50 capitales de provincia habían ganado las opciones republicanas. El recuento total seguía siendo favorable a los monárquicos, pero estos resultados, mucho más desfavorables de lo previsto, desataron la euforia republicana.
El sustituto de Berenguer, el almirante Aznar, sólo encontraba una explicación: «España se acostó monárquica y se ha levantado republicana». Y el Rey, ante un informe tan elocuente, no pudo más que hacer las maletas.
La República llegaba de forma pacífica, pero pronto iban a empezar los problemas. En Barcelona, el coronel Francesc Maciá proclamaba un Estado catalán independiente. Ésta iba a ser una de las grandes trabas de la República. Conseguir que tantos intereses dispares remasen en la misma dirección.
Otras efemérides de este día:
1481: En las Cortes de Calatayud, Fernando el Católico hace plena delegación de funciones en Isabel.
1578: Nace Felipe III.
1865: Herido mortalmente el presidente Abraham Lincoln, que fallecería al día siguiente.
1892: Nace Juan Belmonte, torero español.
1912: Hundimiento del Titanic al chocar contra un iceberg en su viaje inaugural.
1952: Franco y Oliveira Salazar se entrevistan en Ciudad Rodrigo.

lunes, 13 de abril de 2015

13 de Abril de 1499: Fundación de la Universidad de Alcalá de Henares

13 de Abril de 2011 - 09:10:01 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 13 de abril de 1499 el cardenal Cisneros obtenía la bula pontificia de Alejandro VI para la fundación de la Universidad Complutense de Alcalá de Henares. El reinado de los Reyes Católicos fue decisivo para el desarrollo de un auténtico mapa académico en España. Sevilla, Compostela, Zaragoza, Barcelona o Mallorca fueron tejiendo una tupida red de universidades y estudios generales que respondía a las demandas del nuevo espíritu humanista que corría en Europa. Con todo, las mejores universidades no dejaban de ser la de Valladolid y, sobre todo, Salamanca. Pues bien, la Universidad de Alcalá de Henares, la gran aportación cultural de Gonzalo Jiménez Cisneros, junto a la Biblia Políglota, se convirtió enseguida en una de las referencias académicas de España, a la altura del antiguo Estudio salmantino.
Cisneros quiso hacer de Alcalá de Henares el gran centro de sabiduría teológica de la época. A medio camino entre la capital administrativa, Madrid, y la religiosa, Toledo, Alcalá tendría que convertirse en el vivero de educación intelectual y moral del clero español. Su sistema educativo bebió del clasicismo de Salamanca o París, tomando también innovaciones de centros como Bolonia o el Colegio Trilingüe de Lovaina. En plena reforma de las órdenes religiosas, Cisneros contaba ya con su herramienta moldeadora de las nuevas tendencias.
La Universidad de Alcalá discurre pareja a la construcción del Colegio de San Ildefonso, con capacidad para 33 estudiantes de Teología. Jiménez de Cisneros había ideado un colegio-universidad que estableciera en los alumnos un minucioso régimen de vida. En torno al Colegio Mayor de San Ildefonso se construyeron otros menores, Santa Catalina, San Eugenio, Santa Balbina... que fueron dibujando una especie de campus o ciudad universitaria, tal y como se entendería hoy. Todas estas edificaciones dotaron al entorno de un valioso trazado arquitectónico, aunque ninguna pudo superar a la espléndida fachada plateresca de la universidad construida por Rodrigo Gil de Hontañón entre 1541 y 1553, la máxima muestra del esplendor de la universidad en el siglo xvi.
Otras efemérides de este día:
1546: Nace Isabel de Valois, esposa de Felipe II.
1598: El rey de Francia, Enrique IV, promulga el Edicto de Nantes que permite el culto protestante.
1743: Nace Thomas Jefferson, tercer presidente estadounidense.
1862: Los federales inician el ataque contra Nueva Orleans en la Guerra de Secesión.
1913: Atentado frustrado contra Alfonso XIII, cometido por el anarquista Sancho Alegre.

domingo, 12 de abril de 2015

12 de Abril de 1779: Se firma el Tratado de Aranjuez

12 de Abril de 2011 - 09:10:01 - Pedro García Luaces - 2 comentarios
El primer Pacto de Familia entre España y Francia se firmó en 1733, reinando en ambos países los Borbones: Felipe V y Luis XV. El último fue ratificado en 1761 por Carlos III. El sentido esencial de esos pactos se resume en la frase «quien ataca a una corona, ataca a la otra». No se podía incluir en las alianzas de cada uno ninguna nación en que no reinara la casa de Borbón: sólo en 1761 se incorporó Felipe I de Parma, por parentesco y por la parte española. Si alguno de los dos países entraba en guerra con un tercero, podía requerir ayuda militar al otro, dentro de unos límites especificados en número de navíos y de hombres. Españoles en Francia y franceses en España quedaban al margen de las leyes de residencia y de los impuestos al comercio y la sucesión, que se cargarán a los extranjeros en cada caso. Lo mismo ocurriría con los parmesanos tras su inclusión en los acuerdos. Esto permitía a cada súbdito individualmente servir de manera indistinta en los ejércitos español o francés. Así como las dos potencias actuarían de acuerdo en situación de guerra, los tratados de paz con enemigos comunes debían negociarse en conjunto. Este pacto fue firmado por Carlos III en San Ildefonso y por Luis XV en Versalles, y fue revisado en 1768, siete años más tarde, para ampliar aspectos ligados a la navegación y el comercio de ultramar.
El Tratado de Aranjuez de 1779 fue una renovación del pacto anterior, por el propósito de Carlos III de intervenir en la Guerra de Independencia de Estados Unidos para recuperar de Inglaterra Menorca, Gibraltar y Florida. El proyecto final, no explícito en el texto del tratado, era, una vez vencida Inglaterra por los americanos, invadirla en un momento de especial debilidad. Pero eso, como es sabido, jamás llegó a ocurrir. Ciertamente, Menorca y Florida volvieron a los dominios españoles, pero poco más. Francia pretendía expulsar a los británicos de Terranova, obtener libertad de comercio en la India y desplazar a los ingleses de Senegal, cosa que no lograría hasta mediados del siglo xix.
Otras efemérides de este día:
580: Consagración de la iglesia toledana de Santa María, núcleo espiritual del reino.
1204: La Cuarta Cruzada, proclamada por Inocencio III, logra conquistar Constantinopla.
1904: Apuñalamiento de Antonio Maura, que logra sobrevivir.
1931: Elecciones municipales que darán paso a la Segunda República.
1961: El soviético Yuri Gagarin se convierte en el primer hombre lanzado al espacio.

sábado, 11 de abril de 2015

11 de abril de 1713, se firma la Paz de Utrech, conjunto de acuerdos a los que llegaron los países europeos después de la guerra de Sucesión española.

El Tratado de Utrecht, fue realmente un conjunto de tratados firmados por todos los Estados contendientes en la Guerra de Sucesión Española entre los años 1713 y 1715, en la ciudad holandesa de Utrecht, que pusieron fin a la guerra, aunque después continuaron las hostilidades en Cataluña hasta su conquista definitiva por Felipe V en septiembre de 1714 .
Como balance final de los tratados, los países aceptaron acuerdos que cambiaron de forma total el mapa de Europa: Gran Bretaña obtuvo Menorca y Gibraltar, cedidas por España así como el monopolio de treinta años para traficar con esclavos negros con la América española y el “navío de permiso”, que fue una puerta abierta al contrabando inglés.
Las Provincias Unidas de Holanda recibieron una serie de fortalezas en el norte de los Países Bajos españoles cedidas por España, mientras Portugal obtuvo la devolución de la Colonia del Sacramento, ocupada por los españoles durante la guerra.
Austria obtuvo los Países Bajos españoles, el Milanesado, Nápoles, Flandes y Cerdeña , mientras
Francia se comprometió a demoler las fortificaciones de Dunquerque y cegar su puerto, obteniendo definitivamente el principado de Orange, en la Provenza.
Felipe V obtuvo el reconocimiento como rey de España y las Indias, por todos los países firmantes, estableciéndose una cláusula que prohíbe que el trono de España y el de Francia sean una misma persona.
Las tropas austriacas se comprometieron a evacuar Cataluña, lo que realizaron el 30 de junio de 1713 y partir de este momento empezó una guerra desigual que se prolongó casi catorce meses, concentrada en Barcelona, además de algunos grupos de fusileros dispersos por el país.
El punto de inflexión se produjo cuando las tropas felipistas rompieron el sitio de Barcelona el 11 de septiembre del 1714, mientras Mallorca, Ibiza y Formentera cayeron en julio de 1715.
La gran beneficiaria fue Gran Bretaña que, además de sus ganancias territoriales, obtuvo enormes ventajas económicas al romper el monopolio comercial de España con sus colonias y frenar las ambiciones territoriales de Luis XIV de Francia, mientras este país sufrió graves dificultades económicas por los costes de la guerra.
El equilibrio de poder terrestre quedó asegurado, pero en el mar, Gran Bretaña empezó a amenazar el control español del Mediterráneo con sus bases de Menorca y Gibraltar, consiguiendo que la paz de Utrecht hiciera posible para ella asumir el papel de árbitro europeo, manteniendo un equilibrio territorial basado en su hegemonía marítima.
La gran perdedora fue España para la que la paz de Utrecht supuso, el fin de la posición dominante que había ostentado en Europa desde principios del siglo XVI.

viernes, 10 de abril de 2015

10 de abril de 1811, el pueblo de La Nava -Huelva – es ocupado por las tropas francesas que matan a su alcalde Robustiano Carvajal Arellano, destacado participante en la lucha de guerrillas

Un ejemplo singular dentro de la Guerra de la Independencia ocurrido en la provincia de Huelva, lo representó el guerrillero Robustiano Carvajal Arellano, más conocido también por el ‘Tiznao de La Nava’.
El Martes Santo de 1811, las tropas francesas se desplazaban desde la base que tenían en la Prefectura de Aracena por el camino real de Sevilla a Cortegana, cuando una compañía se desvío hacia La Nava y una vez allí, como era costumbre entre los invasores franceses, los soldados asaltaron el Ayuntamiento y lo quemaron con todos los archivos municipales.
Después asaltaron también el pósito municipal – depósito de víveres cuya función primordial consistía en realizar préstamos de cereal en condiciones módicas a los vecinos necesitados – saqueando todo su contenido y llevándose el pan, el queso y el vino de los pobres que estaba preparado para repartirse con ocasión de la romería de Nuestra Señora de las Virtudes, así como el escaso grano que aún quedaba de la última cosecha.
“El Tiznao de la Nava”, quiso vengar la afrenta al pueblo y con su amplia experiencia guerrillera, atacó a los franceses, infringiendo numerosas bajas a sus tropas en el Puerto de los Arriscaderos, aunque estos acabaron por apresarle con su escasa partida de hombres y, ante todos los vecinos del pueblo fue fusilado sin juicio, siendo forzados los vecinos de La Nava a presenciar como espectadores la ejecución del Tiznao y los suyos en el llano de la “dehesa de la ermita”, casi a la misma hora en que estaba previsto el reparto del pan, queso y vino entre los visitantes y los pobres del pueblo.
Desde ese momento, el municipio de la Nava mantuvo la guerra a muerte contra Francia y cuando en 1815, se firmó la paz hispano-francesa, el rey Fernando VII comunicó a todos los ayuntamientos de España que la guerra había terminado.
Si embargo, el entonces alcalde de La Nava respondió también por carta al rey en la se que decía que “él era muy libre de firmar la paz”, pero que su pueblo no lo haría hasta que, al menos, los franceses repusieran “el pan, el queso y el vino” que les habían robado.
La Nava, que en la actualidad cuenta con poco más de trescientos habitantes, está llevando a cabo, iniciativas entre las que destacan los preparativos para la “firma de la paz con Francia”, con la presencia de una representación diplomática de aquel país, además de autoridades provinciales y autonómicas por el interés del hecho desde el punto de vista histórico y cultural.
¡Y luego dicen, que solo los “maños” son tozudos…!

jueves, 9 de abril de 2015

9 de Abril de 1904: Fallece Isabel II, la Reina «de los tristes destinos»

9 de Abril de 2011 - 09:10:13 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
María Isabel Luisa de Borbón (1830-1904) reinó en España como Isabel II entre 1833 y 1868. Para ello fue necesario promulgar la Pragmática Sanción, que derogaba la Ley Sálica, de modo que una mujer pudiese ocupar el trono. En realidad, esta célebre ley había sido dictada secretamente por Carlos IV en 1789, y en 1830 la había hecho pública Fernando VII para garantizar los derechos de su hija. El hermano de Fernando, el infante Carlos María Isidro de Borbón, quien, rigiendo la Ley Sálica, hubiese sido el primero en la línea sucesoria, con el apoyo de los absolutistas, se alzó en armas, dando lugar a la primera de las tres guerras civiles llamadas «carlistas», que se prolongaron hasta 1876.
María Cristina de Borbón, madre de Isabel II, asumió la regencia en la minoría de edad de su hija, siendo desplazada entre 1840 y 1843 por el general Espartero. A la caída de éste y para evitar un nuevo periodo de inestabilidad, Isabel fue declarada mayor de edad a los trece años. Cuando tenía dieciséis, el gobierno de Narváez acordó casarla con su primo, el infante don Francisco de Asís de Borbón, duque de Cádiz, con quien tuvo nueve hijos. El reinado de Isabel fue cambiante, en él se sucedieron gobiernos de distinto signo y tuvieron origen no pocas taras posteriormente extendidas, como la corrupción política. En 1868, la Reina, llamada «de los tristes destinos», fue derrocada por un golpe de Estado, bautizado como la «revolución gloriosa» o simplemente «la Gloriosa», y se exilió en Francia, donde abdicó, en 1870, en favor de su hijo Alfonso XII, quien no reinó hasta la Restauración de 1874, debida al general Martínez Campos tras el paso por el trono de Amadeo de Saboya y por el poder de la Primera República. En París vivió Isabel hasta su muerte, el 9 de abril de 1904, reinando ya su nieto, Alfonso XIII, entonces con sólo dieciocho años.
Otras efemérides de este día:
1553: Fallece el médico y literato Rabelais.
1609: Tregua de los Doce Años con los Países Bajos.
1809: Muere Alejandro Malaspina.
1865: Termina la Guerra de Secesión tras la victoria del general Grant ante el general Lee en Appomattox.
1947: Se publica en la prensa el manifiesto de Estoril, que se opone a la Ley de Sucesión franquista.

miércoles, 8 de abril de 2015

8 de abril de 1906, se produce con la firma el día anterior, el “Pacto de Algeciras”, que otorga a Francia y España poder supremo sobre Marruecos.

La llamada Conferencia Internacional de Algeciras tuvo lugar en esta ciudad española entre el 16 de enero y el 7 de abril de 1906 y su objetivo fue solucionar la llamada primera crisis marroquí, que enfrentaba a Francia con Alemania.
Dicha crisis había surgido en 1904 con motivo del acuerdo suscrito entre Francia y España, con la anuencia del Reino Unido, para delimitar las zonas de Marruecos sobre las que las dos primeras ejercerían su protectorado.
Los alemanes mostraron su disconformidad con este pacto, al estar interesados en tener un protectorado propio en Marruecos, alegando la enorme deuda del sultán con bancos alemanes y el interés de comerciantes germanos en desarrollar actividades en suelo marroquí.
En visto de ello, iniciaron una ofensiva diplomática que culminó con la visita a Tánger del káiser Guillermo II, que anunció su defensa de la independencia marroquí y exigió la convocatoria de una reunión de las potencias afectadas por la situación del sultanato, lo cual implicaba una crítica a los intereses coloniales de Francia en la región.
Se barajaron como sedes las ciudades de Tánger y Madrid, aunque finalmente se designó Algeciras, por ser un lugar equidistante entre Madrid y Rabat, celebrándose las sesiones en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Algeciras, asistiendo; Alemania, Francia, España, Marruecos, Reino Unido, Imperio Austrohúngaro, Estados Unidos, Bélgica, Italia, Países Bajos, Rusia, Portugal y Suecia.
España adquirió obligaciones para ejercer un protectorado en el norte de Marruecos, que quedó designado como “Marruecos español” y a Francia le correspondió el sur, lo cual dejó al Imperio Alemán sin alguna ganancia colonial tangible al final de la Conferencia.
La ambición alemana causó que Gran Bretaña apoyara las pretensiones francesas, pues desconfiaba que Alemania ganase una posición colonial en Marruecos, pensando en Gibraltar y la posibilidad que la Marina alemana instalase una base en el Mediterráneo, reduciendo la situación privilegiada de la Armada inglesa.
Desgraciadamente, los acuerdos no terminarían con el conflicto ya que otra vez se reprodujo en 1911cuando estalló la “segunda crisis marroquí” originada tras la acusación alemana de que Francia había incumplido el Acta de Algeciras.
El envío de un buque de guerra alemán a Agadir para hacer valer sus exigencias territoriales, desencadenó esta nueva crisis internacional, en la que Francia se doblegó a las pretensiones alemanas, cediendo parte del Congo a cambio de total libertad en Marruecos.
Sin embargo nada se consiguió, pues se exaltaron los ánimos nacionalistas franceses y alemanes y se despejó el camino hacia la Primera Guerra Mundial.

martes, 7 de abril de 2015

7 de abril de 1823, atraviesa la frontera española el Ejército francés conocido como “los cien mil hijos de San Luis”, para imponer al rey Fernando VII en el trono.

Tras la finalización de la Guerra de la Independencia, volvió a España el rey Fernando VII en 1814 , uno de cuyos primeros actos de gobierno fue la abolición de la Constitución del 1812 y la restauración del régimen absolutista, con el inicio de la persecución sistemática de todos los liberales.
Sin embargo, en 1820 se produjo un levantamiento liberal para adoptar de nuevo la Constitución de 1812, dando lugar a un proceso conocido como “Trienio Liberal”, donde los liberales se impondrán durante tres años.
Pero en toda Europa, tras la derrota de Napoleón, ya habían vuelto a reinstaurar las monarquías absolutas y veían con recelo el régimen liberal español, por lo que los países que habían sido miembros de la Santa Alianza – Prusia, Rusia y Austria, a los que se unió Francia – decidieron intervenir en España.
En enero de 1823, el rey francés Luis XVIII en la apertura de las Cámaras, anunció que “cien mil franceses estaban dispuestos a marchar invocando al Dios de San Luis para conservar en el trono de España a un nieto de Enrique IV”.
Pronto el ejército francés comenzó a prepararse y el 7 de abril, encabezado por el Duque de Angulema, 95.062 soldados, formados en cuatro cuerpos y uno de reserva entraron en España.
El objetivo fundamental era terminar con los liberales y aunque las fuerzas españolas leales se enfrentaron con los franceses en Cataluña al mando de Francisco Espoz y Mina, al no haber apenas reacción popular de apoyo, debieron retirarse.
Con el avance de Angulema, el Gobierno y las Cortes decidieron trasladarse a Sevilla, instando a Fernando VII que les acompañase y el 10 de abril de 1823 llegó la familia real a la ciudad
El ejército francés ocupó Madrid sin resistencia y los absolutistas decidieron nombrar una Regencia., mientras las tropas siguieron hacia Andalucía en persecución de los liberales.
Hasta el 11 de junio Sevilla fue la capital de España de facto, pero la llegada de las tropas francesas obligó al gobierno a trasladarse a Cádiz, llevándose al monarca con ellos.
Cádiz fue sitiada y bombardeada, pero no pudieron tomarla, aunque destruyeron las fortalezas que la protegían y al no recibir refuerzos, se llegó a un pacto con Fernando VII, según el cual el rey saldría y, a cambio de rendir la plaza, prometería defender la libertad alcanzada por los españoles con la Constitución de 1812 .
Fernando VII en efecto salió de la ciudad, pero de inmediato – como correspondía al rey felón – se unió al invasor y el mismo día decretó la abolición de todas las normas aprobadas durante los tres años anteriores, dando fin al Trienio Liberal.

lunes, 6 de abril de 2015

6 de Abril de 1538: Pizarro derrota a Almagro en la batalla de Las Salinas

6 de Abril de 2011 - 09:10:12 - Pedro García Luaces - 1 comentario
El 6 de abril de 1538 Francisco de Pizarro derrotaba a su antiguo socio, Diego de Almagro, en la batalla de las Salinas. Poco después, Almagro sería juzgado y ajusticiado. Nada parecía apuntar a un desenlace semejante cuando Hernando Pizarro partió hacia España para entregar el quinto real del tesoro de Atahualpa. Llevaba un encargo de Almagro para el emperador, una gobernación propia similar a la de los Pizarro. Carlos V le concedió 200 leguas al sur de las tierras del extremeño, que amplió con otras 70 leguas por sus méritos en la conquista. Al regreso de Hernando, Francisco Pizarro y sus hermanos siguieron conquistando y fundando ciudades, primero la riquísima Cuzco, de la que se hizo cargo como gobernador Almagro, y más tarde la ciudad de los Reyes, que será la capital Lima.
Como Almagro cuenta con sus propios límites para la conquista, Pizarro envía a sus hermanos a recuperar el gobierno de Cuzco y allí se encuentran a un reticente Almagro que de mala gana pone rumbo a Chile, tierra conocida pero aún sin explorar en profundidad. A Almagro no le gustó nada Chile, el paso de los Andes resultó ser durísimo, las tierras parecían poco fértiles y los araucanos hostiles y poco dados a la extracción de metales. Parecía una conclusión precipitada, pero Almagro se dejó convencer por sus capitanes, que deseaban volver a Cuzco, y quiso creer que Pizarro le había engañado sobre los límites y que la rica ciudad le correspondía por derecho. De modo que Almagro regresó a Cuzco y, aprovechando el ataque simultáneo del Manco Yupanqui a las ciudades de Cuzco y Lima, tomó la plaza a la fuerza apresando a los hermanos de Pizarro, Gonzalo y Hernando. Fue un fraile mercedario de apellido Bobadilla quien tuvo que arbitrar la pugna dando razón a los Pizarro, pero Almagro se negó a dejar la ciudad. Liberó a Hernando Pizarro tras obtener de él una fianza en oro y le obligó a rendirle homenaje.
En abril de 1548 el propio Hernando comandaba el ejército de pizarristas que derrotaba a los «chilenos» en la batalla de las Salinas. Almagro fue sometido a un juicio que se prolongará por tres meses y arrastrará un sumario de más de mil folios. Será condenado a muerte y ejecutado pocos días después. La batalla de las Salinas abriría un periodo de pugnas civiles entre conquistadores que habría de durar quince años.
Otras efemérides de este día:
1243: Fernando III confirma los privilegios concedidos en 1218 al Estudio General de Salamanca. Está considerado el acto fundacional de la Universidad de Salamanca.
1732: Nace el botánico Celestino Mutis.
1792: Real Decreto autorizando la publicación del Diario de Barcelona, decano de la prensa diaria española.
1814: Proclamación del rey Luis XVIII de Francia.
1917: Estados Unidos declara la guerra a Alemania en el marco de la Primera Guerra Mundial.

domingo, 5 de abril de 2015

5 de Abril de 1648: Juan José de Austria, el último soldado español

5 de Abril de 2011 - 15:09:58 - Pedro García Luaces - 0 comentarios
El 5 de abril de 1648 Juan José de Austria lograba sofocar la revuelta de Masaniello, en Nápoles. Tenía dieciocho años y se trataba de su primera acción militar de relevancia. Don Juan José era hermano bastardo del monarca, Carlos II. Había nacido fruto de los amores de Felipe IV y la actriz María Calderón, que actuaba en el Corral de la Cruz, muy frecuentado por el monarca. Como el Rey no conseguía heredero varón, decidió reconocer al hijo de «La Calderona» en previsión de futuros problemas sucesorios. Don Juan José de Austria fue educado en la corte, donde recibió instrucción militar y política que pronto pondría en práctica, convirtiéndose en la primera personalidad del reinado de Carlos II y el último gran general de la dinastía Habsburgo. Don Juan permanecería como virrey de Nápoles hasta 1651, siendo su siguiente destino Cataluña, donde lograría hacerse muy querido por su humildad y nobleza. Entre 1656 y 1659 sería virrey de los Países Bajos, donde sufriría sus primeras derrotas y experimentaría el profundo desgaste y la complejidad de este destino. No le iría mucho mejor en Portugal, donde su intento por recuperar el territorio para España no pasó de un prometedor inicio. Don Juan era, en efecto, el general más distinguido de su época y, sin embargo, su padre no quiso darle mayor reconocimiento político, lo que provocó la frustración del joven y un esfuerzo exagerado por emular las hazañas de su homónimo, también natural, el que fuera héroe de Lepanto, don Juan de Austria. Con la muerte de Felipe IV y ante la minoría de edad de su hermanastro, don Juan José padeció el desprecio de su madrastra, doña Mariana de Austria. Conoció el destierro y emprendió desde Cataluña una campaña mediática contra la regente y su valido, el padre Nithard, que coronó con una marcha golpista que llegaría a las mismas puertas de Madrid y terminaría con la expulsión del jesuita alemán. No cesó la presión de don Juan sobre su sucesor, Fernando de Valenzuela, ni contra los manejos de la regente, a quienes logró derribar entrando triunfalmente en Madrid y reuniéndose con su hermanastro en el Jardín del Buen Retiro en enero de 1677. El deseado encuentro entre hermanos presagiaba una inyección de vitalidad en un gobierno deprimido, pero no fue así. La política reformista iniciada por don Juan José fue un desastre para la economía. Dos años y medio después de aquella aparición redentora, don Juan fallecía ante la más absoluta indiferencia de su pueblo.
Otras efemérides de este día:
713: Primer pacto de sometimiento de la historia de Al-Ándalus entre Abd-Al-Aziz, hijo de Musa, y el conde visigodo Teodomiro.
1250: En la Séptima Cruzada las huestes de San Luis se ven obligadas a rendirse ante el desbordamiento del Nilo.
1818: Decisiva victoria de los independentistas sobre los españoles en Maipú, que permite la emancipación de Chile.
1938: Guerra Civil española. Tras la entrada de las primeras tropas nacionales en tierras catalanas, Franco declara abolido el Estatuto de Cataluña.
1979: El jefe del Gobierno camboyano, Pol Pot, huye al extranjero ante las tropas vietnamitas.